Qué ver en Santa Eulalia en Ibiza

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Vista de Santa Eulalia en Ibiza

¿Qué ver en Santa Eulalia en Ibiza? Si te haces esta pregunta porque vas a visitar esta localidad, te diremos que te ofrece todo el encanto de esa isla balear. Cuenta con nada menos que cuarenta y seis kilómetros de costa sembrada de playas urbanas y arenales vírgenes. Pero también con numerosas rutas de senderismo y con un clima envidiable.

Santa Eulalia del Río, su nombre completo, procede de que alberga el único cauce fluvial que existe en todas las Islas Baleares. Ya estuvo habitada en época musulmana, pero fue con la conquista por parte de la Corona de Aragón cuando empezó a adquirir sus rasgos actuales. Hoy la localidad es uno de los principales centros turísticos de Ibiza gracias a sus magníficas infraestructuras y a sus más de trescientas horas de sol anuales. Pero, para responder a tu pregunta, vamos a explicarte qué ver en Santa Eulalia en Ibiza.

Puig de Missa

Puig de Missa

Vista del Puig de Missa

Es el principal símbolo de la localidad ibicenca. De hecho, tras la mencionada conquista aragonesa, el pueblo se construyó a partir de él. Se halla sobre una colina de cincuenta metros de altura y es un conjunto arquitectónico formado por una iglesia con su cementerio y varias pequeñas casas.

Pero también era una fortificación con su torre de defensa equipada con cañones para protegerse de los ataques piratas. Precisamente la iglesia fue construida en el siglo XVI sobre los restos de otra más antigua que quedó en ruinas tras una incursión de aquellos. No obstante, el porche del templo, que es el más grande de todas las Baleares, fue edificado en el XVII para brindarle más valor estético al conjunto.

Tienes una preciosa ruta de senderismo que te lleva desde el centro de Santa Eulalia hasta el Puig de Missa. Te aconsejamos que la recorras para apreciar las maravillosas vistas de la costa que te ofrece. También disfrutarás de calles típicas y, en el trayecto, puedes ver Can Ros, del que te hablaremos más adelante.

Por otra parte, el municipio cuenta con otras iglesias que merecen tu visita. Es el caso de la de Jesús, que, quizá, sea la menos conocida. Fue levantada en el siglo XV y se caracteriza por sus paredes blancas y formas sencillas. Pero en su interior te espera una gran sorpresa. Y es que su retablo mayor es una de las principales joyas sacras de la isla. Lo componen veinticinco tablas pintadas por los valencianos Rodrigo y Francisco de Osona en 1498. Aunque responde al gótico tardío, ya muestra rasgos del incipiente renacimiento.

Finalmente, en cuanto al patrimonio religioso, te recomendamos que también visites la iglesia de Santa Gertrudis, construida a fines del siglo XVIII. Igualmente, tiene un bonito retablo, pero más original es su porche, muy curioso por su pequeño tamaño.

Can Ros, otro imprescindible que ver en Santa Eulalia en Ibiza

Ayuntamiento de Santa Eulalia

Ayuntamiento de Santa Eulalia del Río

Ya te hemos mencionado Can Ros al hablar del Puig de Missa. Pero ahora vamos a explicarte qué es. Se trata de todo un museo etnográfico que te muestra cómo era la vida en Ibiza antes de la llegada del turismo. La exposición incluye ropas, objetos domésticos, utensilios campesinos, instrumentos musicales, armas e incluso joyas.

Pero, tan importante como el interior lo es el edificio. El museo se halla en una típica casa payesa de las muchas que encontrarás en la zona. Este tipo de construcción es una perfecta muestra de arquitectura rural, con su porche y balcón, su cocina y habitaciones, su bodega, su almazara y su pozo con cisterna. En definitiva, una preciosidad y una maravilla funcional.

Por otra parte, no es el único museo que encontrarás en la villa ibicenca. La Sala Barrau, situada en el precioso paseo marítimo de Santa Eulalia, alberga pinturas del barcelonés Laureà Barrau, quien llegó a la isla en 1912 tras formarse en Francia e Italia. Fascinado por su luz y sus colores, se dedicó a retratar su vida y sus gentes.

También te aconsejamos que visites el Centro de Interpretación del Río Can Planetes, que se encuentra a unos setecientos metros de Can Ros. Como esta, se trata de una casa payesa, pero tiene la particularidad de contar con el molino de Dalt, cuyo funcionamiento todavía hoy puedes ver. Incluso conserva el sistema de canales que traían el agua desde el río y la llevaban a los campos a través de acequias.

El Pont Vell

Pont Vell

Vista aérea del Pont Vell

Precisamente, a través de una ruta peatonal llegarás desde Can Planetes al Pont Vell. Es un recorrido que, además, te permitirá empaparte de las leyendas de Santa Eulalia. Entre ellas, no nos resistimos a contarte la del fameliar. Recibe este nombre una suerte de duende que tienen gran fuerza y puede ser de mucha ayuda para el campesino que lo encuentre. Pero también puede arruinarlo porque, cuando no trabaja, posee un voraz apetito.

Pues bien, la leyenda dice que, para encontrar a uno de estos personajes hay que acudir al Pont Vell la noche de San Juan y buscar bajo sus arcos un tipo de flor que solo aparece durante unas horas de ese día. Una vez encontrada, debe guardarse en una botella negra y taparla. Al abrirla diciendo el conjuro feina o menjar (trabajo o comida), aparecerá el duende.

Leyendas aparte, el Pont Vell fue construido en el siglo XVIII, aunque en la centuria siguiente se le añadió un cuarto arco. Fue el único paso sobre el río entre el pueblo y los molinos hasta 1927, cuando se edificó otro más moderno.

Torres defensivas y molino de Es Puig d’en Valls

Torre de Campanitx

Torre defensiva de Campanitx

Ya te hemos hablado de los molinos harineros al hablar de Can Planetes. Llegó a haber cuarenta de ellos en la isla de Ibiza, pero el de Es Puig d’en Valls fue uno de los últimos en construirse. Posee planta cilíndrica y una altura de siete metros. En su cubierta nace el entramado de madera con las aspas que giran mediante un mecanismo de tambor.

Como curiosidad, fíjate en los pequeños ventanucos de su parte alta. Servían para que el molinero observase la dirección del viento y, así, moviera las aspas en la dirección adecuada. Este tipo de molino es único en las islas Baleares, ya que se diferencia de los de Mallorca y Menorca en que no está adosado a una vivienda.

Por otra parte, a la hora de hablarte de qué ver en Santa Eulalia en Ibiza, tenemos que mencionar también las torres defensivas. La más espectacular de ellas es la de Campanitx, con forma cónica y que incluso presenta una pequeña caseta en su parte superior. Junto a ella, también deberías ver las de Can Montserrat, Can Rieró, Can Vidal o Ca sa Blanca Dona.

Fuentes y pozos

Isla de Tagomago

La isla de Tagomago

Muy curioso te resultará ver que los campos de Santa Eulalia están sembrados de pozos agrícolas, algunos de ellos muy antiguos. Buena muestra es el Pou de Gatzara, que ya está documentado en el siglo XVII. Al parecer, no solo daba agua, sino que también era usado por los campesinos para danzar en torno a él para celebrar la festividad de San Jaime.

Asimismo, en una de las mejores rutas de senderismo que puedes hacer en la localidad ibicenca hallarás la fuente de Atzaró. Situada en la ladera del monte homónimo, también está documentada desde el siglo XVIII. Junto a ella, además, puedes ver todo un conjunto arquitectónico que te revelará cómo se aprovechaba el agua de esta fuente para la agricultura.

Consta de un safareig, nombre que se daba a las cisternas de agua excavadas en el propio suelo, acequias para llevar el riego a las huertas, una almazara o trull e incluso un lavadero de ropa. Muy cerca, además, tienes las torres prediales de Can Rieró y Montserrat que ya te hemos mencionado.

Playas de Santa Eulalia del Río e isla de Tagomago

Playa de Santa Eulalia

Paseo marítimo y playa de Santa Eulalia del Río

Frente a las costas de Santa Eulalia tienes la imponente isla de Tagomago, que es de propiedad particular. Sin embargo, ha sido declarada como espacio protegido por el Gobierno de Baleares y ahora solo puede visitarse con fines educativos. No obstante, puedes acercarte a ella con permiso y apreciar sus más de mil quinientos metros de longitud y unos cien de anchura. Asimismo, puedes ver su faro, construido en 1913.

Para terminar nuestro recorrido por lo que ver en Santa Eulalia en Ibiza te hablaremos de sus playas. Ya te hemos mencionado el buen clima de la localidad ibicenca, por lo que sus numerosos arenales son visita obligada para darte un baño en sus aguas cristalinas y tranquilas.

La playa urbana de Santa Eulalia tiene unos trescientos metros de longitud y cuarenta de anchura. Al hallarse en zona residencial y turística, te ofrece todos los servicios. Y también tienes numerosos bares y restaurantes en su entorno. Por su parte, a unos diez minutos del centro urbano está la playa del Río, igualmente muy segura para el baño.

No obstante, quizá prefieras visitar calas más agrestes y vírgenes. En tal caso, te aconsejamos la de Es Pou des Lleó, que conforma un paisaje precioso, ya que está en una abrigada entrada rocosa y cuenta con antiguas casas de pescadores. También te recomendamos la de S’Estanyol, que se encuentra bordeada de pinos y cuenta con rincones submarinos perfectos para el buceo. Finalmente, junto a las anteriores, tienes otras playas como las de Aguas Blancas o Es Figueral y calas como las de Boix, Llenya, Llonga, Mastella, Martina, Olivera o Pada.

En conclusión, te hemos mostrado qué ver en Santa Eulalia en Ibiza. Como has podido apreciar, es mucho lo que tiene que ofrecerte esta localidad. Pero, además, ya que te encuentras en la isla balear, aprovecha para conocer otros preciosos lugares como San Antonio o la propia capital. Anímate a descubrir esta joya del Mediterráneo.

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