Calificar a Ceuta como la gran desconocida supone hacer alusión a lo poco que sabemos de sus atractivos en el resto de España. Esto se debe, en buena medida, a que es una de las dos ciudades de nuestro país que se encuentran en el continente africano.
Su territorio está formado por un istmo, la isla de Santa Catalina y siete montañas que, según la etimología más aceptada, son las responsables de su nombre. Así, Ceuta derivaría de las palabras latinas septem fratres o «siete hermanos» en referencia a estos montes. El numeral se habría arabizado como sebta para desembocar en Ceuta. Pero, una vez te hemos explicado su geografía, vamos a centrarnos en por qué calificamos a Ceuta como la gran desconocida. Es decir, en mostrarte sus principales atractivos.
Las Murallas Reales de Ceuta

Murallas Reales de Ceuta
Son, quizá, el conjunto monumental más famoso de la ciudad, no solo por su valor arquitectónico, sino también porque te ofrece maravillosas vistas del estrecho de Gibraltar y del norte de Marruecos, así como espectaculares atardeceres. Desde 1985 están catalogadas como Bien de Interés Cultural.
Los orígenes de estas murallas se encuentran en la época bizantina, cuando Justiniano I, mandatario del Imperio Romano de Oriente, conquistó la ciudad. Pero la mayor parte de ellas se deben a los portugueses, que, a su vez, las ampliaron y robustecieron a principios del siglo XV. Asimismo, ya en el XVIII, después de que Mulay Ismail sitiara la localidad, volvieron a crearse fortificaciones defensivas.
Entre sus elementos, destaca el foso de San Felipe, que es navegable y que se salva a través del puente del Cristo. Es de tipo levadizo y se le llama así porque, frente a él, hay una pequeña capilla dedicada al Cristo de los Afligidos. No obstante, puedes atravesarlo en barco. El que hace esta ruta se denomina barco del Desnarigado y la realiza varias veces a la semana. Su nombre se debe a un célebre pirata del siglo XV que tenía este mote y cuya guarida se hallaba en una de las calas del monte Hacho.
Sin embargo, quizá el elemento más importante de las Murallas Reales sea el yacimiento arqueológico de la Puerta Califal. Esta era el principal acceso a la ciudad en el siglo X y se construyó, junto a sus murallas, por orden del califa cordobés Abderramán III. Puedes visitar este yacimiento que, además, abarca zonas de otras épocas como la romana o la portuguesa. Por otra parte, la defensa de la ciudad se complementa con otros fuertes.
Otras edificaciones que conforman la fortificación de Ceuta

Las Murallas Meriníes de Ceuta
Respecto a ellas, debes fijarte en las Murallas Meriníes, que protegían el Afrag o campamento real del sultán Abu Said. En estas destaca los restos de la Puerta de Fez. Pero, sobre todo, en el revellín de San Ignacio, fortaleza triangular que hoy alberga una sección del Museo de Ceuta dedicada a las bellas artes.
Asimismo, en el monte Hacho puedes ver una ciudadela que data del siglo XII, aunque se ha reformado muchas veces. La última de ellas fue en el XVIII y se le añadieron varios baluartes. Cien años más tarde se construyeron nueve fortines de estilo neomedieval cuya función era proteger la frontera española con Marruecos. Hoy puedes ver siete de ellos, concretamente, los del Príncipe Alfonso, Mendizábal, Piniés, Francisco de Asís, Isabel II, Anyera y Aranguren.
Finalmente, para dejar de considerar a Ceuta como la gran desconocida, debemos mencionarte también la fortaleza del Desnarigado. Se edificó, justamente, para controlar las reuniones de corsarios que se celebraban en las calas cercanas. Ya en el siglo XVIII se amplió y continuó usándose como bastión defensivo. Pero en 1983 se abandonó este uso para crear en ella un interesante museo militar que todavía puedes visitar hoy.
La plaza de África y la catedral

Catedral de la Asunción de Nuestra Señora en Ceuta
Esta plaza es uno de los centros neurálgicos de la ciudad. En su centro puedes ver el impresionante monumento a los caídos en la Guerra de África de 1859-60. Tiene casi catorce metros de altura y bajorrelieves en bronce debidos al escultor Antonio Susillo. Asimismo, cuenta con una cripta que no puede visitarse.
La plaza de África alberga también la catedral de la Asunción de Nuestra Señora, construida en los siglos XVII y XVIII sobre las ruinas de un templo anterior. Su proyecto corrió a cargo del arquitecto Juan de Ochoa, quien imaginó un templo de rasgos barrocos y neoclásicos. Externamente, destaca por sus las grandes torres y el pórtico de su fachada. Y, en cuanto al interior, debes fijarte, sobre todo, en la capilla del Santísimo, con su retablo barroco y varios frescos obra de Miguel Bernardini.
También encontrarás en esta plaza el santuario e iglesia de Santa María de África, edificado en el siglo XV, aunque profundamente reformado en el XVIII. Por su estilo barroco y sus colores exteriores, hace un conjunto armónico con la catedral y en su interior alberga la imagen de la Virgen de África, donada por don Enrique el Navegante y patrona de Ceuta.
Otras edificaciones religiosas que ver en Ceuta

Templo hindú de Ceuta
Ceuta, la gran desconocida, también posee otros interesantes monumentos religiosos. Entre ellos, destacan la iglesia de Nuestra Señora del Valle, que fue la primera edificada por los lusos, aunque la construcción actual es del siglo XVII. Por su parte, la iglesia de San Francisco data del XVIII y combina elementos barrocos con otros renacentistas. A la misma centuria pertenece la de Santa María de los Remedios, mientras que la ermita de San Antonio es un siglo más antigua. Ubicada en el monte Hacho, a ella peregrinan los ceutíes cada 13 de junio.
Pero Ceuta es conocida como «la Ciudad de las Cuatro Culturas» porque en ella conviven católicos, musulmanes, judíos e hindúes. Por tanto, también estas religiones cuentan con sus propios templos. Así, son muy interesantes las mezquitas de Muley el-Medhi y de Sidi Embarek, la sinagoga de Bet El y el templo hindú, que responde al estilo neovédico moderno.
Además, repartidas por la ciudad hay estatuas de distintos personajes pertenecientes a estas culturas. Es el caso de la del matemático y astrónomo hebreo Ben Yehuda, la del Mahatma Gandhi o la del cartógrafo musulmán Al-Idrissi.
La Casa de los Dragones y otros monumentos civiles

Casa de los Dragones
También podemos hablar de Ceuta como gran desconocida por la escasa resonancia en la península de su patrimonio civil. Sin embargo, en algunos casos es espectacular. Destaca al respecto la Casa de los Dragones, construida al final del siglo XIX por los hermanos Cerni González con planos de Cortina Pérez. Su nombre se debe a cuatro de estas figuras mitológicas que adornan su tejado y responde al estilo historicista con protagonismo neomozárabe.
Igualmente, es muy bonito el edificio Trujillo, con su fachada en chaflán. También es historicista, pero en su caso neobarroco. Puedes visitarlo y merece la pena, sobre todo, por su maravillosa escalera de caracol. Por otra parte, el Palacio de la Asamblea, situado en la mencionada Plaza de África, data de principios del siglo XX y también tiene un interior espectacular. Entre las mejores muestras de ello están el Salón del Trono, que responde al estilo francés; el de sesiones, que es neorrenacentista, y la escalera que, como la rotonda de la fachada es de estilo Imperial. En cambio, la Casa Delgado es una maravilla de estilo art decó.
Por otro lado, a la primera mitad del siglo XX pertenecen también la Casa de los Púlpitos y el edificio de la Autoridad Portuaria. La primera combina el estilo funcionalista de su arquitecto, José Blein, con elementos barrocos y neoclásicos, mientras que el segundo recrea las formas de un barco y se debe a Manuel Latorre.
Asimismo, en la plaza de la Constitución puedes ver varios monumentos entre los que destaca el dedicado a Hércules separando las columnas y en la del teniente Ruiz está el que rinde homenaje a este héroe de la Guerra de la Independencia. Finalmente, en la plaza de la Paz encontrarás los baños árabes, restos de una de estas instalaciones de época musulmana que forman parte de un conjunto arqueológico datado entre los siglos XI y XV.
El Parque Marítimo del Mediterráneo

Parque Marítimo del Mediterráneo
Es uno de los grandes atractivos de Ceuta, pues te ofrece un lugar donde puedes relajarte en pleno centro de la ciudad. Cuenta con más de cincuenta mil metros cuadrados de paseos, lagos en los que puedes bañarte, cascadas e incluso solárium, todo ello rodeado de palmeras. Además, lo complementan un escenario y locales de ocio como bares, pubs y hasta un casino.
Pero, si además te decimos que el conjunto fue diseñado por el artista canario César Manrique, creador de los Jameos del Agua, puedes imaginarte la belleza de este espacio urbano. De hecho, guarda semejanza con la instalación que este artista hizo en el lago Martiánez del Puerto de la Cruz y con el propio Parque Marítimo César Manrique de Santa Cruz de Tenerife.
También debes fijarte dentro del complejo ceutí en el edificio de su parte central que imita a las Murallas Reales y en el rico conjunto botánico que lo adorna. Este último incluye un olivo bicentenario y hasta un drago canario.
Playas de Ceuta

Playa de la Ribera
Todo lo que te hemos mostrado contribuirá a que se deje de considerar a Ceuta como la gran desconocida. Pero también tenemos que hablarte de sus bonitas playas y calas. La ciudad tiene un total de veintiún kilómetros de litoral que se reparten en dos bahías, una bañada por el Atlántico y otra por el Mediterráneo.
Algunas de estas playas ostentan el distintivo de Bandera Azul. Es el caso de la del Chorrillo y la de la Ribera, pero también puedes darte un baño magnífico en las del Desnarigado, El Sarchal, San Amaro o El Calamocarro.
En conclusión, con este artículo hemos pretendido que deje de considerarse a Ceuta como la gran desconocida. Para ello, te hemos mostrado sus principales monumentos, pero también sus playas y espacios naturales. Anímate a conocer esta preciosa ciudad española.